
Caños de la Meca, Cádiz
Esta es la última foto que tengo en la que estamos los tres. ¿Sabes que fue la primera vez que viste el mar, con 4 meses?. Si no has visto estas fotos no dejes de pedirnos las otras y podrás ver cómo contemplabas el mar con mucha atención. Tenías una expresión muy sobria como si por tu cabeza pasaran los pensamientos más profundos que pueda tener alguien después de haber vivido 4 siglos. ¡Me encantaría poder saber qué pensabas!. Esa playa particularmente se encuentra protegida, esta prohibido hacer muchas cosas allí para que así se pueda conservar más limpia y parecida a la playa que era originalmente. La historia de la semana pasada sobre la triste separación de Adan y Eva del jardín que Dios les había creado, me recuerda un poco a esa playa, que tiene que ser un poco separada del hombre para que pueda conservarse. Si la ves ahora, incluso protegida, te dará mucha pena ver lo mal que tratan las personas a las playas. Algunas veces me imagino que soy muy inteligente pero la mayor parte de las veces sé que toda mi vida la he recorrido para aprender sólo una cosa muy sencilla: que el hombre está hecho para obedecer a Dios. Lo sé en parte porque cuando le desobedecemos una realidad terrible se cierne sobre nosotros y nos separa de lo que amamos. Ahora estás exactamente a 1161 kilómetros y hace 4 semanas que no te veo ni te abrazo. Antes lo hacía cada día pero ahora estás muy lejos y esa separación me pone muy triste, mi corazón se llena de angustia y no hago más que pensar continuamente ti, en tu madre y en estas historias de la Biblia que los abuelos contaban a los padres, los padres a los hijos y yo, hoy, en la distancia te cuento a ti mi pequeña querida.
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