¡... y aquí está la reina! ¿¡verdad que es guapísima?! ¡¡¡eres tú!!! Y si Dios me lo permite podré tenerte entre mis brazos el 25 de septiembre, dentro de dos semanas... tu madre quizá me deje estar contigo por la noche por primera vez para poder aprovechar ella la oportunidad de salir de fiesta por la noche. Ella ha decidido no acompañarnos más y tenemos que respetarla. Yo estoy bastante nervioso porque, si eso pasa, quizá te pongas muy nerviosa por lo estraño de la situación. He comprado muchos muñequitos, he cargado un video de Pocoyó en el iPod y he pensado algunos juegos para tratar de que nos lo pasemos bien. Espero que nos lo pasemos muy bien, como este verano en el camping, con los cavalls, los globos y la piscina... Te quiero, mi vida.